Declararse en quiebra o en bancarrota es una decisión compleja. Puede parecer que tomar este camino implica que su mundo se derrumba a su alrededor. Sin embargo, la bancarrota no significa que todo el peso del mundo recaerá sobre usted. Por el contrario, al declararse en bancarrota el peso de la carga de sus deudas se anula, y tiene usted la oportunidad de un nuevo comienzo. Por supuesto, esto no significa que la bancarrota no tiene inconvenientes. Entonces, ¿cómo afecta la bancarrota su calificación de crédito?
¿Es la bancarrota la decisión correcta para usted?
A pesar de que la decisión puede parecer negativa, es importante recordar que la bancarrota implica la anulación de la carga aplastante de la deuda. Si para una persona el pagar la deuda de la tarjeta de crédito se convierte en una lucha constante, el perder el acceso a esta carga puede permitirle aprender a manejar sus finanzas sin la necesidad de acceder a este servicio.
Una de las mejores maneras de considerar la bancarrota es enfrentando la realidad de su actual situación financiera. Pregúntese si podría pagar la totalidad de la deuda en un plazo de dos años, en 24 cuotas. De no ser posible, ¿acaso prefiere arrastrar una deuda inservible y recibir golpes continuos en su calificación crediticia?
O por el contrario, ¿prefiere aceptar que debe restringir sus finanzas, ahorrándose la tortura y la carga de vivir en una pesadilla de deudas donde ni siquiera puede pagar los intereses mensuales?
Calificación de crédito
Como se mencionó anteriormente, al declararse en bancarrota, bajo los capítulos 7 y 13, su calificación de crédito se verá afectada. Sin embargo, esto no significa que la bancarrota no sea su mejor opción. Tampoco significa que declararse en bancarrota necesariamente destruirá su crédito, ya que este proceso puede ser la ruta más rápida para mejorar su puntaje crediticio.
Si usted ya tiene una baja calificación de crédito, el impacto esperado en su puntaje crediticio disminuye considerablemente. Si usted está atrasado en el pago de sus tarjetas de crédito o tiene facturas por pagar, la bancarrota es una excelente solución a largo plazo para reconstruir una baja calificación de crédito. Esto se debe a que la bancarrota puede eliminar ciertos tipos de deudas, incluyendo:
- Deudas de tarjetas de crédito
- Préstamos sobre su sueldo
- Facturas de servicios públicos
- Juicios de morosidad sobre ejecuciones hipotecarias y embargos
- Sentencias de propiedad – incluyendo daños y rentas atrasadas
Eliminar la carga de estos tipos de deudas puede ayudarle a tener un nuevo comienzo financiero y a aprender a tomar mejores decisiones económicas, lo que le llevará a tener una mejor calificación crediticia en el futuro.
Comuníquese con un abogado de bancarrota hoy mismo
Si se encuentra hundido en un mar de deudas y quiere proteger sus bienes ganados con tanto esfuerzo, necesita tomar medidas para mejorar su calificación de crédito. Es importante, además, que se comunique inmediatamente con un abogado experimentado en bancarrota. La bancarrota no es el fin, ¡es la oportunidad de un nuevo comienzo! Llame a las oficinas de Patrick L. Cordero, abogado de bancarrota en Miami, para una consulta gratuita hoy mismo, al (305) 445-4855.